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El enrojecimiento permanente de la piel con cuperosis

Piel con cuperosis... Un bonito nombre para una afección que a menudo es difícil de sobrellevar. La cuperosis es la aparición de finos vasos sanguíneos rojos o morados en la cara. Este enrojecimiento localizado es permanente y puede ser una verdadera molestia. Cuanto mejor entiendas esta afección, mejor podrás tratarla.

¿Por qué tengo manchas en la piel?

Cuando la piel se pone roja, es porque los vasos sanguíneos se dilatan. Normalmente, esta dilatación es solo temporal, y el enrojecimiento desaparece cuando los vasos vuelven a la normalidad. Si sufres de rosácea, y más concretamente de piel con cuperosis, los pequeños vasos sanguíneos de tu rostro permanecen «hinchados». Por lo que se hacen evidentes y pueden verse a simple vista en la piel. Esta afección afecta a las pieles hipersensibles, que ya de por sí tienden a enronjecerse repentina y excesivamente ante la más mínima irritación. En los últimos años, los especialistas han identificado otras causas, como la inflamación relacionada con la inmunodeficiencia.

Una piel sana
B Piel con cuperosis

b2_av_peaux-sensibles_schema_dilatation_vaisseaux-sanguins_1x1_v3 472x472 1. Hipodermis 2. Dermis 3. Epidermis 4. Vasos sanguíneos
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¿Qué causa la cuperosis?

La cuperosis puede ser provocada y favorecida por diversos factores internos y externos. Conocer estos factores te ayudará a entender mejor tu piel y sus reacciones:

  • Alimentos: el enrojecimiento pueden causarlo alimentos demasiado picantes o calientes, así como bebidas alcohólicas
  • El entorno exterior: el viento frío o la exposición prolongada al sol pueden poner a prueba la piel hipersensible
  • Cosméticos inadecuados: algunos productos contienen ingredientes que pueden ser agresivos con tu piel, otros no contienen los activos necesarios para calmarla adecuadamente
  • Tomar corticosteroides: este tipo de tratamiento puede hacer que los vasos sanguíneos se dilaten y que la piel se vuelva más frágil

Piel con cuperosis

¿Se puede combatir la cuperosis?

No te preocupes, hay soluciones para tratar la cuperosis. Las rojeces no son inevitables, puedes poner en marcha a partir de ahora acciones concretas que te permitan sentirte mejor con y en tu piel:

• Optar por cosméticos formulados con los ingredientes adecuados: los productos para el cuidado de la piel sensible con tendencia al enrojecimiento contienen activos capaces de reducir la dilatación de los vasos sanguíneos a la vez que calman y protegen la piel
• Reducir el riesgo de irritación: utilizar movimientos suaves y evitar frotar cuando se limpie o desmaquille el rostro

• Protegerse del entorno externo: los rayos UV, el viento frío, el aire caliente, el agua dura, etc.; hay muchos agresores a los que la piel puede ser sensible, así que hay que tener cuidado y proteger la piel del rostro
• Evitar las especias y el alcohol: ciertos alimentos y bebidas contribuyen a la aparición de rojeces en la piel, así que hay que adaptar la dieta a la sensibilidad
• Maquillaje para corregir: se pueden utilizar productos de maquillaje específicos para disimular las rojeces localizadas del rostro, como un stick corrector verde (este color ayuda a neutralizar el enrojecimiento de la piel), junto con una base de maquillaje adecuada para cubrir y unificar la tez.

 

Unas palabras de nuestro personal experto

Existen diversos tratamientos médicos y dermatológicos para la cuperosis, como el láser vascular. Te aconsejamos que consultes a un dermatólogo que podrá diagnosticar la afección con precisión y proponer el tratamiento más adecuado.

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