La piel hipersensible puede reaccionar de forma tan desagradable como repentina. Entonces sientes una molestia que quieres aliviar rápidamente (¡y lo entendemos!). Sigue la guía para saber qué hacer.
¿Acabas de probar un nuevo producto cosmético y la piel te empieza a escocer? ¿Estás en el transporte público, en la oficina o con los amigos, y de repente se te enrojece el rostro? Tu piel acaba de reaccionar ante un agresor. Estas sensaciones son una gran molestia para las personas con pieles intolerantes e hiperreactivas. ¡Sobre todo porque estas reacciones son imprevisibles! Para calmar rápidamente esta irritación, puedes adoptar algunas prácticas sencillas.
Buenas prácticas para calmar la piel reactiva
Limpiar la zona afectada con una loción para pieles intolerantes aplicada con la yema de los dedos.
Rociar la piel con una bruma de agua termal para calmar de forma natural las irritaciones.
Aplicar una crema calmante, preferiblemente sin perfume y sin conservantes como los productos de Cosmética Estéril®, para introducir en la piel solo ingredientes adecuados para pieles intolerantes.
Pieles reactivas: qué evitar
Evitar limpiarse con agua corriente, ya que algunas pieles hipersensibles también son reactivas a la cal y al cloro, lo que puede aumentar las molestias. Si se aclara el rostro con agua, terminar con una fina bruma de agua termal para calmar y eliminar cualquier rastro de compuestos potencialmente irritantes.
Para limpiar la piel, optar por una textura suave, como una leche o una loción en gel, que se aplicará directamente con las yemas de los dedos para evitar irritar demasiado la piel con un disco de algodón. Si el desmaquillado con algodón es esencial, se recomienda empaparlo primero con agua termal y luego con el producto limpiador, para ablandar las fibras de algodón: ¡un efecto refrescante garantizado!
CONSEJOS AMABLES Y ESPECIALIZADOS
Piel hipersensible: ¿cuándo hay que consultar a un experto?
Piel tirante, enrojecimiento grave, picor extremo, hinchazón... Si has experimentado este tipo de reacción en varias ocasiones, debe consultar a un dermatólogo sin demora. Puede derivarse de una alergia, que puede, por ejemplo, causar eccema o urticaria. Una consulta te permitirá investigar la causa de esta alergia realizando, si es necesario, pruebas de alergia.
En cualquier caso, tu médico podrá orientarte sobre los productos limpiadores y de cuidado adecuados para tu piel.
Calmar la piel reactiva
¿Cómo evitar un brote?
Utilizar los productos adecuados cada día
Cuando la piel está bien hidratada y protegida, los brotes son menos frecuentes y menos intensos. Por lo tanto, todos los días debes aplicarte una crema o bálsamo hidratante adecuado para pieles hipersensibles, idealmente sin perfumes ni conservantes, como la Cosmética Estéril®. La piel será entonces más resistente a las agresiones externas.
Por último, es importante no aumentar el número de cosméticos aplicados en la piel cada día. Cuantos más productos diferentes utilices, más probable será que te encuentres con una loción o crema que tu piel tolere con dificultad. También hace más difícil identificar las causas específicas de las reacciones.
Identificar las causas de los brotes
La piel intolerante tiene reacciones repentinas y a menudo imprevisibles. Sin embargo, puedes intentar evitar el hormigueo, la tirantez o la irritación identificando el factor desencadenante.
La piel hipersensible puede reaccionar a un factor externo, como los irritantes de algunos cosméticos, un contaminante en el aire o la exposición al sol. Si uno de estos agresores desencadena molestias e irritaciones en tu piel, ya puedes evitarlo o proteger tu piel cuidadosamente de antemano.
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